Carbonia 29 de marzo de 2022
María Santísima: Queridos hijos, es con ansioso amor que vengo una vez más a llamaros a la verdadera conversión del corazón.
Hemos llegado al final de un tiempo viejo, el nuevo ya está abriendo sus puertas para acoger a los hijos de Dios. En este tiempo de infinita miseria, mantened vuestra fe en Cristo Jesús.
Las Obras de Dios serán atacadas de manera indescriptible, la furia de Satanás no se detendrá, su maldad irá más allá de todos los límites.
Hijos del Amor, mi Corazón Inmaculado arde de amor por vosotros, acompañadme, permaneced conmigo, obedientes a la voluntad del Padre, ... Protegidos bajo mi manto estaréis conmigo victoriosos contra Satanás.
Ahora lloverá granizo del cielo, la cosecha se perderá. Rezad, invocad la misericordia de Dios, para que su Corazón sea tocado por vuestro grito de ayuda.
¡ORAD, HIJOS MÍOS, ORAD!:
Detén, oh Padre, tu Brazo, no permitas que tus pequeños pasen hambre, que tu objetivo sean los que te han traicionado y martirizan diariamente a tus hijos.
Estamos cansados de ser esclavizados por Lucifer, este mundo está en ruinas, ... su maldita venganza no caerá sobre tus hijos, oh Padre.
Haz descender rayos del cielo para romper sus lanzas, no dejes que vuelva a enfrentarse a tus criaturas. Lanza tu Basta sobre él, … ¡reprímelo!
Recibe las lágrimas de tu Madre y de todos tus pequeños, los que día y noche invocan tu Misericordia.
Tu pueblo está cansado, Señor, y clama a ti su pasión y muerte, … ¡Basta! ... Quema a los malvados en el infierno, da paz y serenidad a tu pueblo.
Ven Padre, ven y eleva a tus hijos hacia ti, ellos arden de amor por ti, anhelan habitar en ti.
¡Es hora de hacer cosas nuevas! ¡Ven, Señor, ven! Amén.