No dejes que tus hijos jueguen con el diablo



Se aproxima Halloween y algunas tiendas se decoran con motivos de dicho aquelarre. No pocos padres no saben por dónde les viene el aire y entre la televisión y el colegios, dos vectores de adoctrinamiento, tienden a disfrazar a sus hijos de brujas, brujos, personajes de terror y de demonios. Hablemos claro, no sólo es una fiesta importada de los Estados Unidos, es un aquelarre satánico, en el que se rinde homenaje al diablo, dándole entrada en el alma de nuestros niños.


Sobre un trasfondo de estúpida inocencia, se practican abortos rituales en las sectas satánicas precisamente ese día. Me parece una celebración abominable, la abominación de la desolación, que no sólo muestra el paganismo en el que se ha sumergido nuestra sociedad sino directamente la ausencia de normas morales y el carácter diabólico.


Dar culto a nuestros antepasados ya muertos y a todos los Santos, son días para rezar a las benditas ánimas del Purgatorio y encomendarnos a los Bienaventurados, en una cadena de plegarias con los que nos precedieron, procurado desagraviar por tanta gilipollez y tanta inconsciencia. Vade retro.


Enrique de Diego http://www.ramblalibre.com/