Observatorio vaticano rechaza los mensajes anti bergoglio


¿Por qué el nuevo Observatorio Internacional sobre las Apariciones?, entrevista con uno de sus miembros



Franca Giansoldati en Il Messaggero, Abr-21-2023, presenta una entrevista con sor Daniela Del Gaudio (imagen), única mujer miembro del recientemente creado Observatorio Internacional sobre las Apariciones. 

El Vaticano ha creado una task force para medir la veracidad de los fenómenos paranormales, del tipo Virgenes que lloran sangre, visiones celestiales, bilocaciones, estigmas. «Estos eventos extraordinarios existen y realmente suceden, pero hay que decir que son rarísimos». Para decirle a Il Messaggero qué criterios se utilizan para verificar su solidez está sor Daniela Del Gaudio, la única mujer incluida en el nuevo Observatorio Internacional sobre las Apariciones (OIA), un organismo recién nacido impulsado por la Pontificia Academia Mariana. Profesora de teología dogmática, autora de decenas de volúmenes sobre mariología, Del Gaudio intenta arrojar luz sobre un terreno resbaladizo y delicado que a menudo es el centro de controversias (y engaños descarados). 

¿Por qué nació esta task force sobre lo paranormal? 

«Para ayudar a los obispos de todo el mundo cuando se enfrentan a noticias de eventos similares en su territorio diocesano. Estamos disponibles para proporcionar la información que se necesita una vez se necesite. Es un apoyo más que se suma a los procedimientos vigentes para el discernimiento de las apariciones de la Congregación de la Fe». 

¿Qué instrumentos hay para detectar engaños y estafas? 

«La verificación principal se hace escuchando los testimonios de visu. Los autodenominados videntes son analizados con base en a su moralidad, a su equilibrio psíquico, a la rectitud en la vida cotidiana. Si alguien ha sido acusado en el pasado de delitos tales como bancarrota, estafa u otros, es evidente que no constituye un elemento favorable. Y luego se explora la personalidad. El presunto vidente no debe estar enfermo de protagonismo, no debe tener el deseo de lucrar con su actividad. Y luego miramos también la docilidad que muestra hacia la autoridad eclesiástica. Finalmente, si hay mensajes, estos no deben contener elementos negativos, en contraste con el magisterio y la teología». 

Deme un ejemplo... 

«Si hay mensajes teñidos de tintes milenaristas, apocalípticos o si tienden a dividir la Iglesia o aterrorizar a la comunidad, a los católicos. Solo por mencionar uno de los casos más frecuentes. Nuestra Señora ciertamente no quiere asustar o crear cismas, rupturas, heridas». 

¿Llegan muchos reportes de Virgenes que se manifestan? 

«Muchísimos, pero luego yendo a recabar sucede que las cosas no siempre son así como parecen...» 

¿Son los obispos los primeros en intervenir? 

«Exacto. Las normas vigentes prevén un primer proceso a nivel local: los fenómenos deben clasificarse como revelaciones privadas y no pertenecen a la revelación pública, por lo que no constituyen materia de fe. El más grande mariólogo que ha tenido la Iglesia, el padre [René] Laurentin había sintetizado bien la cuestión diciendo que aunque un fiel, por ejemplo, no crea en Fátima, no comete pecado y, por tanto, no es necesario ir a confesarse». 

¿Cuántas son las apariciones aprobadas hasta ahora? 

«Muy pocas. Lo sobrenatural existe, pero ciertamente no es lo que se ve en las películas. Los milagros también existen. Después de todo, Jesús hizo muchos: se trata de signos para ayudar a aquellos que tienen fe a tener la prueba de que Dios puede intervenir interrumpiendo también la ley de la naturaleza. En todo caso, la santidad es siempre simple, los verdaderos místicos son humildes». 

¿Existen casos de bilocaciones? 

«Obviamente. Entre los casos más llamativos me gusta recordar el relativo al Padre Pío. Hay pruebas de lo que le sucedió a un sacerdote de Rovigo que acudió a San Giovanni Rotondo. El Padre Pío le pidió que se quedara unos días pero él respondió que no tenía ganas porque preocuparía a su hermana que vivía en Rovigo ya que no le había avisado antes. En ese preciso instante, a setecientos kilómetros de distancia, la mujer se encontró frente a su casa con la imagen del Padre Pío quien le informó que su hermano se quedaría en Puglia por 48 horas más y que no se preocupara. El sacerdote se enteró de esto cuando regresó a Veneto. La hermana (una mujer sana y equilibrada) todavía estaba convulsa por el evento inexplicable. Sobre bilocaciones a mí en lo personal, siempre me llama la atención los hechos de Kibeho, en Ruanda, ocurridos en 1721. Una vidente entraba en catalepsia y hacía viajes místicos y al despertar describía cosas muy particulares sucedidas en otras partes del mundo, o que aún estaban por suceder. Todo serio y documentado. Simplemente alucinante. Obviamente inexplicable desde un punto de vista científico». 

¿La historia de la Virgen de Trevignano que llora sangre, para Usted es un engaño? 

«No quiero hablar de esto porque existe una investigación en curso». 

Hay presuntos videntes que afirman ver la Virgen en horas y fechas preestablecidas, como si fuera una especie de programa de televisión. ¿Le parece creíble? 

«Obviamente, esto nunca es un signo positivo ». 

¿Cuántas son las apariciones certificadas en la historia? 

«Solamente una veintena. Y todo con características de total seriedad. La Iglesia avanza con prudencia y con pies de plomo". 

¿En Italia hay en el momento apariciones serias que estén estudiando? 

«La primera se refiere a una mística, Pierina Gilli, de Montichiari que murió en 1991. Y la otra se refiere a las apariciones de Agnone, a Michelino Marcovecchio, un hecho más reciente con apariciones que continúan»