EE.UU.: Los laicos resisten con éxito a la rigidez de Francisco
Entre las dos diócesis vecinas de Washington DC y Arlington, de los 30 lugares donde se celebraba la misa tradicional han quedado sólo 11, es decir 1/3, siguiendo la rígida Traditionis Custodes (2021) de Francisco.
Los culpables locales de ello son el cardenal Gregory y el obispo Burbidge. En un momento de colapso general de la asistencia a misa, estos prelados luchan contra sus mejores laicos.
Noah Peters, abogado y presidente de la Arlington Latin Mass Society, escribe en CatholicHerald.co.uk (18 de mayo) que estas misas habían atraído a grupos cada vez más grandes de familias numerosas, jóvenes y muchos conversos, entre ellos Peters.
Las misas supervivientes se están trasladando ahora a lugares fuera de la ciudad: pequeñas capillas, gimnasios escolares y salones parroquiales, mientras que las iglesias del Novus Ordo están vacías.
La lucha de Francisco contra sus fieles los ha estimulado. Están donando tiempo, dinero y trabajo para embellecer los nuevos lugares de culto y organizando concentraciones semanales de rosarios ante la nunciatura en Washington DC.
También se han celebrado dos grandes peregrinaciones Summorum Pontificum, con cientos de católicos haciendo el recorrido de dos horas desde Arlington hasta la catedral de Washington.
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