Reparten el Cuerpo de Cristo en cuencos de IKEA —JMJ



Los bergoglianos, tanto laicos como curas y obispos, que han acudido ingenuamente a la JMJ, se han sorprendido de que los organizadores hayan denigrado a Cristo colocándolo en un cuenco de cocina de lo más tirado para ser repartido en la Comunión, durante la Misa del Encuentro de los españoles, pero no de que el `Papa´diga herejía tras herejía. 

Si hubieran razonado mínimamente durante estos 11 años de `pontificado´y tiempo no les ha faltado, se darían cuenta de que no debían asistir a un evento organizado por un clero pro Agenda masónica que afirma que no pretende convertir a los jóvenes que allí acuden, a Cristo. Y claro, una consecuencia es que se ha ninguneado al Hijo de Dios privándole de ese mínimo de honor que consiste en ser distribuido en un copón digno. 

El mensaje ha sido claro desde el principio pues en el programa `católico´de la JMJ se incluía la visita a una mezquita y una sinagoga, y creo que hasta un templo budista, como si toda creencia fuera lo mismo pero con diferentes matices.

Según publica Infovaticana: "esta iniciativa (de los cuencos de IKEA) buscaba transmitir un mensaje de humildad y sencillez, invitando a los jóvenes a reflexionar sobre el valor de los elementos materiales en la liturgia" dejando claro que:" la decisión fue consensuada y de completo acuerdo con las autoridades eclesiásticas"