Declaraciones contundentes aquí y allá tanto de Burke como de Brandmüller (los últimos cardenales de la Dubia) sin que se dé el paso de la corrección formal al propalador de herejías, a Lutero II.
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“Todo aquél que afirma que puede iniciarse un nuevo vínculo mientras una pareja casada está viva todavía, está excomulgado, porque esto es una herejía”, dijo el 28 de octubre el cardenal Walter Brandmüller, de 88 años de edad, al diario alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung.
Brandmüller explica: “es un dogma que el matrimonio es un sacramento y, en consecuencia, es indisoluble”. Señala que ningún adúltero puede recibir la Santa Comunión.
El cardenal no puede entender que Francisco no responda los Dubia respecto a Amoris Laetitia. Él pregunta: “¿Puede ser bueno hoy algo que ayer era pecado?” y ¿hay todavía acciones que son moralmente condenables siempre y bajo todas las circunstancias – como, por ejemplo, matar a un inocente o el adulterio?”.
Brandmüller está preocupado por un posible “cisma” en la Iglesia.