3 maneras de ser una bendición en el trabajo


https://www.christiantoday.com/article/3-ways-christians-can-be-a-blessing-in-the-workplace/119603.htm

El Señor Jesús nos llama la "luz del mundo". Él nos dice que en Él somos un pueblo cuyas verdaderas identidades traen luz y esperanza a otros para la gloria del Padre. Él nos dijo en Mateo 5:16,

"Deja que tu luz brille ante los hombres, para que puedan ver tus buenas obras y glorificar a tu Padre que está en los cielos".

Uno de esos escenarios es el lugar de trabajo. Podemos ser una bendición para nuestros superiores, nuestros colegas y las personas que están debajo de nosotros. Podemos ser una bendición para prácticamente cualquier persona con la que tengamos contacto en relación con nuestro trabajo: clientes, jefes, financiadores y cualquier otro.

Dicho esto, todos debemos darnos cuenta del potencial que tenemos para llevar el amor de Dios a todas las personas. Y debemos hacer todo lo que podamos para brillar intensamente para la gloria de Dios.

Especialmente diseñado

Muchos de nosotros pensamos que no podemos hacer nada bueno aparte de lo que se nos asigna. Eso es pensar mal, una mentalidad pobre y derrotada que dice "No soy lo suficientemente bueno". Amigos, Dios ha diseñado específicamente a todos y cada uno de nosotros para que podamos hacer cosas buenas. Efesios 2:10 nos dice:

"Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para las buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas".

Piénsalo. Estás especialmente diseñado para el trabajo que Él preparó de antemano. ¡Todo lo que necesitas hacer es descubrir lo que debías hacer y hacerlo!

Cómo los cristianos pueden ser una bendición en el lugar de trabajo:

1) Sé un buen compañero de trabajo

En un mundo lleno de personas negativas y egocéntricas, ¿no sería bueno tener a alguien genuino y sinceramente esperanzado con nosotros? ¿Como un amigo que prefiere hablar de la vida y ser un buen compañero de equipo en cada proyecto?

Elige ser esa persona. Sea un buen compañero de trabajo, alguien que elige alentar y elevar a los demás en lugar de desalentarlos y menospreciarlos.

2) Sé un excelente trabajador

Independientemente de su posición, e independientemente de la cantidad de dinero que te paguen por su trabajo, elige trabajar de manera excelente. Elige caminar la milla extra y llevar la carga extra cuando sea necesario.

Nuestra excelencia en el trabajo no sólo beneficia a nuestra empresa o nuestros clientes. También nos ayuda a obtener una mejor posición entre las personas a quienes servimos.

3) Sé un trabajador devoto

No lo olvides: antes de ser un empleado o propietario de una empresa, eres un hijo de Dios. Ora por ti mismo para que puedas trabajar bien. Ora por tus jefes y tus colegas. Ora para que tu compañía se alinee con la voluntad de Dios. Mejor aún, ora para que la gente de la compañía se salve y para que todo el grupo siga al Señor.

Nada bendice un lugar de trabajo mejor que Dios mismo.