¿Apoyó el Vaticano a los detractores de Pell?



Algunos piensan que los enemigos del cardenal George Pell han estado usando acusaciones sin fundamento contra él, escribe Henry Sire en The Dictator Pope (2017).

Señala las notables coincidencias entre los brotes en el caso de abuso sexual (que supuestamente lo involucraban) y los momentos de presión en las luchas internas contra Pell, quien desde la Secretaría de Economía intentó limpiar las finanzas del Vaticano.

En febrero de 2015, Pell descubrió en varios dicasterios del Vaticano 1.400 millones de euros que no aparecían en los balances. Según Sire, esto despertó a los adversarios de Pell, especialmente a los Cardenales Calcagno, Versaldi, Bertello y Parolin, que consideraban a Pell como "el enemigo principal".Pell le pidió repetidamente a Francis la destitución de Calcagno como presidente de la Administración del Patrimonio de la Santa Sede (Apsa). 

Francisco respondió que necesitaría pruebas de mala conducta. Aunque se le presentaron prueba tras prueba, Francisco protegió a Calcagno con quien cenaba casi todas las noches.

En Australia, la policía persiguió a Pell con extraordinario vigor ante acusaciones falsas. Un grupo de trabajo especial entrevistó a Pell en Roma en 2016.En junio de 2017, se tomó la decisión de procesarlo. 

Regresó a Australia donde fue condenado por abuso sexual que no pudo haber ocurrido (según ya hemos explicado*).

Según Henry Sire, el cardenal Parolin supo el 19 de junio de 2017 a través del nuncio australiano que Pell enfrenta un juicio. Un día después obligó a Libero Milone, la mano derecha de Pell para limpiar las finanzas del Vaticano, a renunciar.

*ver

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