María Ferraz
Al card Sepe (imagen) más le valdría estar de rodillas ante el Santísimo Sacramento implorando el perdón por los escándalos de este pontificado, y por la salvación de su grey, y así cumplir con su papel de llevar a las almas al Cielo. En lugar de eso prefiere inclinarse ante los pobres colocándose un delantal de camarero, mostrando ante la prensa que en la Casa de Dios ya no se sirve a Dios sino pizzas y espagueti a los comensales y se les llena la barriga convenientemente.
Esos pobres que llenan la Casa de Cristo sin ningúna reverencia, sin respetar la paz de Quien vive allí, hablando y deglutiendo sin parar. Y a los musulmanes, predilectos de los bergoglianos, cuya fe ha sido y es adversaria del Dios cristiano, se les invita a allanar Su morada sin ni siquiera explicarles Quién es Él, en cuyo nombre reciben caridad.
Porque, ¿habrán bendecido la mesa antes de comer? Seguro que no, visto el falso respeto de Francisco, que ha llegado en varias ocasiones a negarles la bendición a los católicos que se reunen en torno a él, por temor a ofender a los ateos o no cristianos. Pero está claro que no teme ofender a Aquel que dijo: "el celo por la Casa de Dios Me devora"
Ya sabemos a qué se pueden dedicar todos estos bergoglianos cuando se les expulse de la Iglesia por traidores: a servir mesas en una taberna de tres al cuarto, ya que se han hecho indignos de servir en el Altar de Dios
Lo peor es que además se preparó un numero musical dentro de la iglesia, ¿Y de qué iban disfrazados los cantantes? Pues de papanoel, faltaba más, el personaje que ha eliminado de la mente y el corazón de los niños al Niño Dios el día de Su nacimiento.
Informa en.news:
Otro cardenal convierte la iglesia en restaurante
El cardenal Crescenzio Sepe, de 75 años, transformó la iglesia barroca de Santi Severino e Sossio el 25 de diciembre en un restaurante.
El Cardenal, que llevaba un delantal rojo, estaba sirviendo personalmente a varios cientos de "pobres" seleccionados que participaron en el espectáculo destinado principalmente a las cámaras.
El evento, organizado junto con la comunidad de izquierda de Sant'Egidio, se llama "almuerzo de solidaridad".
Ha existido durante años. Hasta 2015 tuvo lugar en el Palazzo Donnaregina de Nápoles.
En 2016, Sepe comenzó a servir pizzas y pastas en la iglesia de Santi Severino e Sossio.