Harare, Zimbabwe- John Bradburne, nacido en Gran Bretaña y fallecido en Zimbabwe hace 40 años, podría estar en camino de convertirse en el primer santo canonizado del país. Bradburne es una figura venerada entre la comunidad católica en el país sin litoral del sur de África de Zimbabwe. Según los informes, Bradburne recibió un disparo en la espalda después de ser secuestrado de su choza en Mutemwa, en el noreste de Zimbabwe.
Nacido en 1921 de padres anglicanos en Cumbria, Inglaterra, Bradburne se convirtió al catolicismo en 1947 mientras vivía con monjes benedictinos, después de haber tenido una experiencia religiosa durante la Segunda Guerra Mundial.Vivió después de su conversión como peregrino, viajando entre Inglaterra, Medio Oriente e Italia. Fue un poeta prolífico. Bradburne se unió a los Franciscanos de la Tercera Orden Secular en 1956. Más tarde se puso en contacto con el p. John Dove, un amigo jesuita que vive en Zimbabwe. Bradburne preguntó si había una "cueva en África" donde pudiera rezar. Dove lo alentó a mudarse a Zimbabwe, donde llegó en 1962. En Zimbabwe, le dijo a un sacerdote franciscano los tres deseos de su vida: "servir a pacientes con lepra, morir mártir y ser enterrado en el hábito franciscano".
En 1969, siete años después de su llegada al país, se cumplió el deseo de Bradburne de atender a los pacientes afectados por la lepra, cuando fue nombrado el cuidador principal de Mutemwa Leprosy Settlement, un centro que atiende a pacientes con lepra.Bradburne pasó horas con pacientes. Se levantaba a las 3:00 cada mañana, lavaba pacientes, los vendaba, comía con ellos y hablaba con ellos. A algunos de ellos los llevó a misa. Pero se enfrentó con los líderes del centro sobre las condiciones en que vivían los pacientes y, finalmente, fue despedido.
Se le permitió vivir en una cabaña de hojalata desierta de una sola habitación en el complejo del asentamiento. Su casa no tenía agua corriente, pero estaba contento de estar cerca de los leprosos, a quienes continuó ayudando en todo lo que pudo. Durante la guerra civil de Zimbabwe, que duró desde 1964 hasta 1979, Bradburne protegió a los leprosos de la explotación, algo que despertó sospechas, especialmente, dicen los locales, porque era extranjero. Los lugareños se volvieron hostiles hacia él, pero rechazó las ofertas de otros cristianos para llevarlo a un lugar seguro.Bradburne murió el 5 de septiembre de 1979 cuando fue asesinado a tiros a los 58 años. Fue enterrado en el hábito franciscano, como esperaba.Durante su entierro, se encontraron tres gotas de sangre inexplicables debajo de su ataúd, según los informes.
Por su compasión hacia los afligidos, Bradburne ha sido llamado el "Damián del siglo XX" en referencia a San Damián de Molokai, que se preocupaba por los leprosos en Hawai.“
El amor que los leprosos continúan sintiendo por él, debido a sus sacrificios, es realmente sorprendente ”. Kate McPherson, del John Bradburne Memorial Trust, dijo a los periodistas en julio. En una entrevista con la BBC, el padre Fidelis Mukonori, que trabajó en estrecha colaboración con Bradburne, recordó el relato de su amigo: "Desde el día que puse mis ojos en estas personas, descubrí que también soy un leproso entre mi propia gente".
"Trabajando para ellos y con ellos me siento apreciado, que estoy haciendo algo bueno y me llaman Baba [Padre] John".
"Llegó con pocas posesiones, solo amor", dijo a la BBC Colleta Mafuta, de 78 años, sobreviviente de la lepra que conocía a Bradburne."La colonia estaba sucia y la gente estaba sucia. No había medicamentos, ni ropa, y la gente pasaba hambre. Se ocupaba de las necesidades de todos: alimentar a las personas, lavar y vendar nuestras llagas", agregó.
Según Independent Catholic News, dos personas han afirmado curas milagrosas por la intercesión de Bradburne: una mujer en Sudáfrica que recuperó el uso de sus piernas y un hombre en Escocia curado de un tumor cerebral.
El 1 de julio, la Congregación del Vaticano para las Causas de los Santos aprobó las investigaciones iniciales sobre la causa de santidad de Bradburne. El 5 de septiembre, el arzobispo Robert Ndlovu de Harare celebró una misa en Mutemwa donde Bradburne sirvió, para conmemorar 40 años desde su muerte y lanzar oficialmente su causa de santidad.
CNA