Francisco negó en el Ángelus del 25 de julio la multiplicación de los panes por parte de Cristo, convirtiendo el milagro en moralismo.
Afirmó: "Es interesante que en los relatos de la multiplicación de los panes en los Evangelios, el verbo 'multiplicar' nunca aparece: no. Al contrario, los verbos utilizados tienen el significado contrario: 'partir', 'dar', 'repartir'. Pero el verbo 'multiplicar' no se utiliza. El verdadero milagro, dice Jesús, no es la multiplicación que produce vanidad y poder, sino el reparto que aumenta el amor y permite a Dios realizar maravillas [que, según Francisco, no se producen]".
En realidad, los Evangelios afirman en sus diversos informes que Cristo tomó muy pocos panes y alimentó a miles con ellos.
Francisco ha negado este milagro ya varias veces repitiendo obstinadamente el mismo argumento erróneo.
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