Sacerdote denunciado al fiscal por proclamar el catecismo



El padre Matthieu Raffray, miembro popular del Instituto del Buen Pastor, publicó el 15 de marzo en las redes sociales un vídeo catequético muy inocente sobre las "tentaciones" en el que mencionaba, entre otras cosas, la obviedad de que los actos homosexuales son pecaminosos.

"Todos tenemos debilidades, el que es avaricioso, el que tiene mal genio, el que tiene tendencias homosexuales. Todos los pecados, todos los vicios que pueden existir en la humanidad y contra los que podemos luchar".

Las anodinas palabras del padre Raffray provocaron un estallido irracional de Aurore Bergé, la ministra francesa contra la "discriminación". Sin argumentos, calificó la moderada declaración de "intolerable" (cf. Juan 6) y denunció al sacerdote a la dirección de la `Gaystapo´.

El proceso contra Raffray tiene pocas posibilidades de éxito, pero la situación ilustra la creciente hostilidad del régimen francés hacia el catolicismo.

Raffray declaró a FamilleChretienne.fr (21 de marzo) que "siempre he tenido mucho cuidado de no herir ni ofender a la gente, especialmente en este ámbito tan delicado".

Y "Todo lo que he hecho es expresar la doctrina católica". Añadió que "no es a mí a quien se acusa, sino a la enseñanza de la Iglesia".

En el pasado, el padre Raffray se pronunció a favor de la terapia de conversión homosexual, prohibida por el gobierno francés en 2022.

En enero, en un juego de palabras, Raffray declaró en Twitter.com que "cualquier ejercicio espiritual es una terapia de conversión". Este comentario desencadenó la habitual oleada de comentarios enfurecidos de extremistas homosexuales.


Traducción IA